(Un texto de Dudamel Rambler)
La moda: Acaso la más alta expresión
del carácter efímero de nuestra
cultura.
La Moda...
¿Por qué se siguen sus dictados?
¿Por qué seguimos? ¿Por qué la moda
pasa?
¿Por qué todo pasa de moda?
¿Por qué pasamos?
¿Hay que huir del pasado?
La moda, género femenino, descansa en
ese
género: sería difícil concebir su
existencia sin
la presencia del género femenino...
Una mujer moderna no puede prescindir,
debe estar a la moda:
Una mujer que no se actualiza no tiene
futuro.
Hay que actualizarse: hay que dejar
atrás el
pasado para tener acceso al futuro,
deslizarse.
El presente es lo que pasa; si uno se
ata al pasado,
no pasa (No te van a dejar pasar
así...)
No se puede estar fuera de uso:
Usar la misma vestimenta, el mismo
desodorante, las
mismas palabras, la misma ideología,
las mismas
emociones...
La moda viene a exorcizar nuestra
idoneidad
repetitiva: podemos seguir repitiendo
los mismos
errores, los mismos despropósitos
siempre que
cambiemos nuestra apariencia.
Las modas permanecen efímeras.
Una fórmula exitosa que postula la
prevalencia
de lo efímero (las fórmulas exitosas
siempre
se repiten): Un movimiento continuo,
que hay
que obedecer, sólo obedecer...
Centros de poder
que imponen cambios y modos de cambiar
Se debe obedecer, seguir ese dictado, ese
dictamen, esa dictadura: se debe ser adicto.
Se impone, se establece, se dicta:
Hay que observar, hay que copiar, hay que
adoptar: adaptarse a los cambios
para mantenerse vigente
Vi gente correr, y no estabas tu
(estarías cambiándote)
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