(Pascual Rambler)
Me llevó consigo un viejo
que pronto mostró la hilacha:
(no era una hilacha cualquiera)
-Si te digo que no, te miento.
Si te digo que no te miento,
te miento.
Siempre miente…
-Es verdad.
No mienta, no se puede mentir siempre:
la mentira tiene patas cortas.
-Yo también. Sí, se puede.
Siguiendo su lógica, debo interpretar
lo contrario.
-La lógica no es mía, y la frase no me
pertenece.
Ahí dijo al menos una verdad.
-Toda mentira contiene algo verdadero.
Nada nos pertenece tanto como nuestras
mentiras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario