(Ricardo Mansoler)
Buscaba un sobre
como el que busca un verso.
Los sobres son diversos
como los versos. Sobre cómo
ensobrar un verso no hay nada
escrito.
En cambio, el verso
basta con escribirlo, si viene:
No hace falta buscarlo, sólo
hay que recibirlo cuando viene.
Luego, hay que buscar un sobre
acorde para ensobrarlo y despacharlo
como precedente, hacia el destino
final.
Si llega o no llega, no es cosa
del poema, que seguirá su camino
protegido adentro del sobre.
El sobre ya lo tenía, faltaba completar
el último verso y escribir en el anverso
un remitente falso, como todos.:
Es un trámite que hay que completar,
como la vida con todos sus géneros.
El género epistolar fue superado
por la realidad virtual que le pasó
por encima o sobre: Se ahorró mucho
tiempo.
Sobreviven los sobres, hubo muchos que
sobraron y no se sabe muy bien qué hacer
con ellos para darles alguna utilidad.
Ensobrado el verso que faltaba
para completar el poema, sólo falta
enviarlo -un trámite- y esperar que llegue
a destino:
Mi amigo muerto solía pedirme ésto.
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