(Nicasio Uranio)
-Mirá, papá. Un paparulo…
-Callate, hijo, no digas esas cosas.
-¿Por qué, pa?
-Está mal calificar a alguien que no
conocemos. No se puede juzgar por
la apariencia.
-Pero yo sé…
-¿Cómo podrías saber, si no lo conocés?
-Una vez que vino un señor que te quería
vender algo, vos dijieste: este es un paparulo.
Yo me acuerdo, y éste era muy parecido…
¿Vos lo conocías?
-No sé, no mucho. Pero no importa, igual
está mal decirlo así, en la calle. Mirá si te
escucha, el paparulo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario