(Dudamel Rambler)
La Autoridad de Aplicación dudaba
entre multarlo o mutilarlo.
Era una falta menor, concedían, pero
así se empieza. Estas cosas es mejor
cortarlas de raíz:
El que hoy roba una gallina, mañana
desvalija un banco. Ahora caza una
rata de campo y mañana un productor
agropecuario o un empresario.
Conviene cortar por lo sano, y que
cunda el ejemplo. La próxima vez
que tenga ocasión de delinquir, se
mirará la mano que le falta y lo pensará
dos veces.
Si todos pensáramos en lo que nos falta
dos veces antes de actuar, el mundo sería
otro.
Quien usa sus manos para estas cosas,
no las merece. Lo mismo es extensivo
para la cabeza y cualquier otro miembro.
Hay que darle una mano a la justicia
(Tampoco hay mucha diferencia entre
multar o mutilar: apenas una letra)
A la justicia la hacemos entre todos,
sólo no aceptamos la justicia por mano
propia.
Hay que darle una mano a la justicia:
Traiganmé todas las manos.
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